1. Mechanical Devastation 2. Self-Extinction Of Mankind 3. The End 4. Chernobyl 5. Reabilitation Begins 6. Wall Of Death 7. N.W.O.T.Maniax 8. Hedonism 9. New World Order 10. Global Degeneration
Symbol Of Domination, junto a los sellos Metal Race y Murdher Records, re-editó a finales del año pasado “Global Degeneration”, la puesta de largo que el trío ucraniano Reabilitator había publicado de manera independiente en 2012. El trabajo -remasterizado y con las guitarras y la voz regrabadas para la ocasión- es auténtico, fiel y genuino thrash metal old school del estilo que forjaron a fuego bandas como Anthrax, Overkill o Nuclear Assault y que está viviendo un resurgimiento de la mano de la New Wave Of Thrash Metal, capitaneada por grupos como Violator o Municipal Waste y con los que Reabilitator guardan un estrecho parecido.
La alerta roja de Mechanical Devastation nos indica que la amenaza del ataque de la vieja escuela y de la mejor tradición es inminente. Esta pista junto al himno New Wave Of Thrash Maniax y la dupla formada por la colosal Reabilitator Begins y Wall Of Death marcan los momentos álgidos del trabajo. Y es que, canción tras canción, los de Zaporizhzhia desgranan el decálogo completo de lo que musicalmente debería ser un disco de estas características: feroces cambios de ritmo y tiempo, riffs de guitarra veloces y afilados, una batería aplastante y ultra-rápida -quizás demasiado desbocada en ocasiones-, unas líneas de bajo en un primerísimo plano y una voz agresiva, áspera y chillona -servida por el también batería-.
La única pega del disco la encontramos en el hecho que todos los temas van a piñón fijo, guardando entre ellos demasiadas similitudes y dejando muy poco espacio a la aparición de diferentes tesituras, lo que da como resultado que la audición acabe siendo bastante farragosa.
“Global Degeneration” enloquecerá a un sector de fanáticos del thrash de los ochenta. Difícilmente encuentre admiradores en un círculo más amplio, pero dudo que a los chicos de Reabilitator se les haya pasado por la cabeza hacer algún tipo de concesión. Sólo hace falta escuchar el adelanto de su segundo trabajo “Social Programming” para corroborarlo.