DIVINE WEEP: “The Omega Man” (2020) (Ossuary Records)

1. Cold As Metal 2. Journeyman 3. Firestone 4. Riders Of Navia 5. The Screaming Skull of Silence 6. Walking (Through The Debris Of Nations) 7. Die Gelassenheit 8. Mirdea Lake 9. The Omega Man

El pasado mes de junio fue testigo del lanzamiento de “The Omega Man”, la esperada continuación del primer elepé de los polacos Divine Weep, cuyo título “Tears Of The Ages” (2015) reseñamos debidamente en RRWZ. Formados a mediados de los noventa en la ciudad de Bialystok de la mano del guitarrista Bart Kosacki y el batería Daro Karpiesiuk como un número de black metal, la llegada del nuevo milenio vió como el fuego de la banda se extinguía rápidamente. Pero tras un parón de diez años, Kosacki y Karpiesiuk reactivaron el combo y, con la llegada del bajista Janusz Grabowski (y más tarde con la incorporación del guitarrista Darek Moroz y el vocalista Igor Tarasewicz), orientaron la carrera de Divine Weep hacia un heavy metal tradicional con grandes influencias del power europeo, publicaron el EP “The Age Of The Immortal” (2013) y posteriormente hicieron lo propio con su notable primer larga duración.
En “The Omega Man”, sin abandonar el inalterable heavy metal de raíz clásica, el quinteto suaviza sus influencias germanas para incorporar y dar mayor cancha a elementos propios del thrash y el speed norteamericanos o el black de sus inicios. Esta virada dota a su nueva propuesta de un sonido más duro, agresivo y complejo que su antecesor, siendo en gran parte posible gracias a la incorporación del versátil vocalista Mateusz Drzewicz (Hellhaim, Subterfuge y fundador del sello Ossuary Records), una suerte de Tim Ripper Owens cuyo amplio rango vocal le permite, partiendo de su voz limpia con un toque rugoso, alcanzar excelentes agudos y proferir voces guturales.
El inaugural Cold As Metal es heavy metal de manual con un riff inicial al que se le suma la segunda guitarra y un solvente agudo, unas estrofas de enérgica cadencia con excelentes voces dobladas, intenso puente y demoledor estribillo. Le sigue Journeyman con un fantástico punteo, unas buenísimas guitarras rítmicas y una poderosa voz semi-rota, un sosegado y melódico verso principal y un fragmento central armonizado súper denso y heavy. La incendiaria Firestone empieza con un robusto riff y una percusión thrash en las estrofas, prosigue con un melodioso estribillo y salta por los aires con el demoledor cambio de ritmo repleto de voces guturales y blast beats.  Llegando al ecuador del plástico nos topamos con Riders Of Navia, la regrabación de la power ballad aparecida en su EP y el presagio que tras la calma llega la tormenta. The Screaming Skull of Silence es sencillamente demoledor, repleto de cambios de tempo, ritmos blackers y con Matt mostrando todas las facetas de su voz a través de tonos descarnados, agudos y guturales.
Walking (Through The Debris Of Nations) contiene un fabuloso riff a lo Dokken, otra abrumadora interpretación vocal y devastadoras variaciones rítmicas intermedias. Die Gelassenheit es una brevísima pista que sirve de preludio a Mirdea Lake y su velocidad sin parangón, mientras que el título homónimo cierra el disco de forma brutal con la banda al máximo nivel y el cantante exprimiendo al máximo sus cuerdas vocales y obsequiándonos con unas frases en español.
Con “The Omega Man” Divine Weep han superado con creces el listón marcado con “Tears Of The Ages”. Han dado un golpe sobre la mesa y un gran salto en su carrera facturando un álbum furibundo, feroz y metálico que abre una nueva, y tal vez definitiva, vía en su personal empresa. ¡Inapelable recomendación!
Sitio web: www.facebook.com/divineweep (M.M.)