miércoles, 20 de julio de 2022

IRONBOURNE: “Ironbourne” (2021) (Pure Steel Records)

1. The Dreamer 2. Elusive Reality 3. Varsel 4. Twilight Of Gods 5. Too Late 6. Covenant 7. Hit The Wall 8. Runaway 9. Year Of Judgement

“Mientras unos dieron su vida por la extracción del hierro, otros la dan por el heavy metal” reza solemne el inspirado texto promocional que presenta a esta novel banda sueca. Pero que la noche no nos confunda: si bien Ironbourne -nombre surgido en honor a los valerosos antepasados que dieron sus vidas extrayendo el mineral de hierro de los pozos mineros- se define orgullosa como una formación de heavy metal, tal vez sería más acertado decir que su estilo se encuentra escorado hacia un hard rock que bebe de la esencia del heavy metal más seminal. En base a esto, el curtido quinteto de Ludvika (fundado en 2019 por Olof Geijer a la guitarra, Lars Andersson al bajo y Stefan Viktorsson a la batería, a los que posteriormente se les unieron el cantante Torbjörn Andersson y el guitarrista Jonas Windle) nos ofrece en su debut homónimo un trabajo dominado por los pesados e inalterables riffs de guitarra, las sobrias y densas cadencias rítmicas y el buen trato de la melodía, encarnado por el registro rugoso y potente de Andersson que se eleva hasta tonos más altos y suaves para abordar los emocionales estribillos.
The Dreamer comienza con una imperturbable melodía arpegiada con cierto regusto southern y se sumerge en una esencia roquera heredada de los británicos The Cult, mientras que Elusive Reality posee una entrada oscura que rememora a Black Sabbath, pero que progresa hasta adquirir un ritmo similar al del tema The Zoo de los germanos Scorpions.
Varsel, la única pieza cantada en sueco, maneja un impertérrito riff con cierto aire groove sobre el que se van superponiendo los versos hasta llegar a la emotiva estrofa principal, y el ritmo cabalgante de la brutal Twilight Of Gods nos brinda un corte claramente deudor del libro de estilo de Manowar, con un épico estribillo y unos coros castrenses típicos en los neoyorquinos.
La melodía acústica a dos guitarras es la protagonista de la poderosa balada Too Late, con un bonito crescendo coronando el verso principal, y por su lado, un irresistible ritmo sincopado (que evoca remotamente al de Train Of Consequences de Megadeth) se adueña de Covenant.
Hit The Wall tiene un sombrío arpegio, unas saturadas notas de bajo y un denso riffage, Runaway imprime mayor velocidad al discurso ofrecido por los suecos hasta el momento, con un lacerante punteo recortando las frases y un resolutivo estribillo, y Year Of Judgement se impregna de cierto aire doom con la voz seminarrada entre notas de bajo y armónicos de guitarra, y despega con un posterior y letal ritmo galopante.
Todavía les queda mucha piedra por picar, pero el yacimiento abierto con “Ironbourne” concentra minerales suficientes para proporcionarnos un filón de férreo metal en el futuro.
Sitio web: www.ironbourne.se (M.M.)